La temporada de lluvias trajo consigo un problema de magnitud para el sector del transporte de carga y pasajeros en el departamento de Tarija, por un lado, los derrumbes en la carretera al Gran Chaco han perjudicado de sobremanera el paso de vehículos como también en la Red Vial Departamental.
El concejal municipal por Entre Ríos, Eduardo Fernández, ha señalado que a pesar de que la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) ha contratado a empresas que movilizan maquinaria pesada a fin de garantizar el paso de motorizados en medio de derrumbes, las precipitaciones pluviales han superado todo esfuerzo humano y los productores agrícolas deben optar por otras vías para ejercer su actividad económica.
“En la zona de Entre Ríos la carretera está muy complicada, me imagino que por las fuertes lluvias especialmente en la variante Canaletas – Entre Ríos, también hemos visto un buen equipo de maquinaria pesada haciendo la limpieza, sin embargo, hay riesgo para circular por ese lugar, llueve permanentemente, es parte de la temporada y hay que asumirlo con responsabilidad”, argumentó.
El ejecutivo de la Federación del Auto Transporte “15 de Abril”, Gabriel Pérez Valdez, ha explicado que debido a los cortes esporádicos de la variante, los conductores optan por transitar por el “camino antiguo” o tramo Narváez – Castellón, que también está en pésimas condiciones.
Por su parte, las subgobernaciones están movilizando maquinaria y personal para despejar la Red Vial Departamental.
¿La solución?
Según el criterio del ejecutivo del Transporte Federado, las soluciones paliativas son destacables en época de lluvias pero solo representan más gastos para las arcas del Estado.
Consideró que la única solución es que la ABC ejecute las obras complementarias a la variante Canaletas – Entre Ríos, una labor postergada por el Gobierno Departamental.
El Periódico
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