El director de
Seguridad Ciudadana del Gobierno Municipal de Yacuiba, Héctor Liquitaya,
desmintió enfáticamente que el personal de la Guardia Municipal, junto a ODECO,
Intendencia y Policía boliviana, hayan cometido supuestos maltratos físicos y
verbales a la hora de desalojar a los comerciantes ambulantes de las calles,
aceras y avenidas adyacentes al mercado siniestrado.
La mañana del
martes 30 de marzo, el titular de la Dirección de Seguridad Ciudadana, aseguró
que el trabajo realizado en los pasado días relacionado a dejar expeditas las
calles, aceras y avenidas de la zona del Mercado Campesino, se lo ejecutó en el
marco del respeto y priorizando el diálogo y concertación con los comerciantes
ambulantes que estaban asentados en esa zona.
Liquitaya,
señaló que los funcionarios de la Guardia Municipal al momento que son
contratados, reciben una serie de capacitaciones sobre relaciones humanas, relaciones
públicas e incluso el contenido de la Ley 348, además de los derechos y
garantías constitucionales de las personas, por lo que hizo notar que están
preparados para brindar un buen trato en el accionar que efectúan.
El profesional
abogado, aseveró que el municipio de Yacuiba, es uno de los pocos a nivel
nacional, que durante la gestión del alcalde Ramiro Vallejos, ha evitado
vulnerar los derechos humanos sobre todo de los comerciantes. Recordó que en
ningún momento se utilizó la represión y que al contrario siempre utilizó el
diálogo, porque es la mejor manera de dar solución a los problemas.
“Nuestra
autoridad municipal se reunió con los comerciantes ambulantes en despacho,
donde se planteó las mejores alternativas para reubicarlos hacia el Mercado San
Gerónimo, donde van a contar con todas las condiciones de seguridad e higiene.
Ellos han agradecido la voluntad que tiene nuestra MAE en querer darles todas
las comodidades posibles”, enfatizó Liquitaya.
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