De los 96 millones de deuda amortizada en este semestre,
450.000 fueron para pagar a contratistas. La deuda suma 1.656 millones.
El Gobernador Óscar Montes es economista y, básicamente, un
planificador, por eso la presentación de los informes de gestión es una de sus
especialidades y de ahí que haya incluido una más a medio año para contrastar
los avances. Así se presentó en el Salón Rojo para detallar ingresos y egresos
con algún as bajo la manga a fin de pedir más crédito, pues el mensaje final
fue claro: hemos ordenado la casa y estamos en disposición de saltar a otra
fase.
“Sabemos lo que estamos haciendo, este año finalmente hemos
logrado sacar a la Gobernación del pozo. Podemos indicar que las finanzas del
Gobierno Departamental están totalmente controladas y el endeudamiento
detenido. La reducción de la deuda nos permite liberar recursos para cumplir
todos los compromisos de carácter social, como ser el Prosol, canasta y
transferencias; están garantizados los recursos para todas las actividades y
proyectos que tenemos comprometidos”, explicó Montes.
Deuda Montes detalló que el total de la deuda asciende a
1.656 millones, aproximadamente la mitad de lo estimado al inicio de su gestión
Quizá el primer dato que llama la atención en el informe es
la precisión con la que se vienen registrando los ingresos, algo que en
numerosas ocasiones se había retrasado. En la actualidad el Gobierno ha
transferido el 50,5 por ciento de los recursos contemplados en el presupuesto,
en concreto 526 millones hasta el 30 de junio sobre 1.042 del presupuesto
anual. En esto llama también la atención el escaso impacto que ha tenido hasta
ese mes el ingreso por regalías – un 52% de los 518 millones presupuestados, es
decir, 269 -, a pesar de que el dato estaba construido con un barril de
petróleo estimado en los 50 dólares y desde marzo supera los 100. Los expertos
señalan que se sentirá el impacto más en el segundo semestre por el pago
demorado de 90 días, pero señalan que el volumen comercializado también ha
bajado.
Montes ha incluido en su presupuesto un capítulo al que
denomina “recursos en tránsito”, que tienen igualmente origen petrolero, pero
que legítimamente se separa ya que no son de libre disposición, sino que el
Gobierno los entrega para cubrir determinado programa, como la Renta Dignidad.
Así, las regalías suponen un 51% de los ingresos, pero los recursos en tránsito
otro 31%, es decir, en total el 82% del presupuesto depende prácticamente de
ello.
Gastos, pagos y deudas
En el capítulo de gastos, el gobernador detalló que un 23%
se reparte entre retenciones y caja y banco y un 77% corresponde a los egresos
efectivamente ejecutados, es decir, 403 millones de bolivianos que deberían
haberse puesto en circulación, aunque hay una peculiaridad: casi el 25% de eso
ha ido a amortizar deuda contraída con Bancos y contratistas, en total 96,2
millones, que aún tiene un desglose peor: apenas 450.000 bolivianos han ido a
alivianar deudas de las empresas contratistas en estos seis meses a pesar de
que aun se les debe, según los datos, 320 millones de bolivianos, un tercio de
lo que se debe a los bancos y que asciende a 905 millones.
El otro gran capítulo de gastos es precisamente el de los
recursos en tránsito, con unos 150 millones de bolivianos, mientras que el
funcionamiento asciende a 30 millones de bolivianos siendo el 7,4% del total.
Finalmente, Montes detalló que el total de la deuda asciende
a 1.656 millones, aproximadamente la mitad de lo estimado al inicio de su
gestión en mayo de 2021, aunque a 31 de diciembre de ese 2021 la deuda estaba
en 1870 millones de bolivianos.
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