Derramaron aceite en algunas calles para que no circulen las motocicletas de los uniformados. Por noveno día, cocaleros de los Yungas vuelven a marchar para recuperar su edificio.
Nueve días seguidos, vecinos de Villa El Carmen sufren por los enfrentamientos entre cocaleros y policías por la retoma del edificio donde Adepcoca trabaja. Cansados de los ruidos de los petardos, dinamitas y los gases lacrimógenos, se apostaron en una calle que da a la avenida para reclamar paz y respeto.
Los carteles elevan el pedido desesperado de quienes se han convertido en víctimas de un conflicto que no encuentra solución. "Basta de maltratos" o "No más gasificación" expresan el sentir de una veintena de vecinos apostados sobre la avenida principal.
Los gritos de "queremos paz" interrumpen brevemente la marcha de los cocaleros que se acerca, por noveno día, a la zona resguardada por la policía.
Cansados de los excesos y molestos por el perjuicio que los gases provocan a las personas mayores, han optado por una protesta singular. Rociaron de aceite algunas calles de la zona para impedir el paso de las motocicletas de los uniformados. El aceite hace que la vía sea muy resbalosa.
Un vecino reveló a Página Siete que se sienten agotados ante la fuerte represión policial en la zona, que implica, por ejemplo, el uso masivo de gases lacrimógenos. Las denuncias también vinculan a los policías por provocar incendios en dos viviendas, según testigos, precisamente por el uso indiscriminado de agentes químicos.
Con la calzada resbaladiza, los manifestantes podrán huir por las aceras mientras que las motocicletas no podrán avanzar por el asfalto.
El aceite sobre el asfalto impide el tránsito normalizado y evita la movilización de los policías. Foto: Captura de pantalla
Continúan las protestas
Los productores de coca de los Yungas mantienen una vigilia desde hace 9 días ante la imposibilidad de acceder a la central de Adepcoca departamental. El pasado lunes, en un ampliado apresurado, se eligió como presidente de la Asociación a Arnold Alanes, a quien los marchistas en desacuerdo califican como "un títere del gobierno".
El comité de autodefensa propone realizar una asamblea inmediata una vez que se retome el edificio. De esta manera, los socios productores definirán qué hacer con la asociación y cómo elegir a una nueva autoridad.
"Me van a dar el viceministerio de la Coca"
El dirigente cocalero Armin Lluta se ha convertido en principal freno para que se impongan las intenciones del Gobierno. Lluta mantiene firme su postura de no ceder a las presiones y resolver los problemas al interior de la asociación de productores de coca de manera orgánica. Desconoce la representatividad que pueda tener Alanes, quien accedió al cargo en una conflictiva asamblea.
Lluta resultó secuestrado y apareció un día después abandonado en una zona apartada y con muestras evidentes de haber sido agredido.
Días después confesó al diario Los Tiempos que desde el Gobierno "le pidieron que renuncie a Adepcoca a cambio de dinero y cargos en la administración pública", y de esa manera dar por finalizado el conflicto en el sector.
“Me pidieron que renuncie y Armin Lluta va a ser el viceministro de Coca, me van a dar el Viceministerio de la Coca, y así mismo podría ser el candidato a las futuras elecciones para diputado de los Yungas, también me han ofrecido dinero”, dijo el dirigente a los periodistas.
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