El que no se pone
un barbijo y ni se acuerda que existe el distanciamiento social exige que se
den mejores condiciones sanitarias; la que se pone un barbijo debajo de la
nariz y saca a su wawa a la calle sin ninguna protección, reclama porque se le
pidió que se cuide. Aquel que gritaba que el coronavirus no mata a nadie está
buscando una cama en terapia intensiva mientras se acuerda que rezar también
ayuda.
Me duele sentir que
no solo necesitamos vacunarnos contra el coronavirus, también necesitamos
vacunarnos contra la mala educación, mucho más cuando escucho reclamos de
quienes no tienen la más mínima idea de lo que es cumplir normativas.
Me tocó asistir a
la reunión del COE de Cochabamba, escuchaba las propuestas de diferentes
técnicos de la gobernación y alcaldías y después vinieron las voces de
representantes de organizaciones, primero reclamaban que se debería tener a más
representantes de organizaciones y después reclamaban por el incumplimiento de
normativas. Fue ahí y exactamente ahí cuando casi caigo de espaldas, es que lo
primero que me puse a pensar es que hablaba uno de los que representaba a un
sector que no tiene la más mínima intención de cumplir con las prohibiciones o
restricciones, entonces ¿a qué estamos jugando si reclama el que solo incumple?.
Es el colmo de los
colmos escuchar que un reclamo contra la pandemia y el coronavirus viene de
quien se pasó de un lado al otro las ordenanzas, ya basta de dar tanta
importancia a aquellas personas que no están pensando en nuestra salud.
No puedo dejar de
mencionar a las autoridades que se fueron y a algunas que todavía están en
función. El pasado fin de semana vimos operativos después de mucho tiempo,
porque hasta hace algunas semanas eso se había dejado de lado. No me vengan a
decir que mucha gente no se contagió en fiestas de boliches llenos de personas,
que entre tanta borrachera ni se acordaron que había una pandemia en marcha.
Ni nos dimos cuenta
que en un momento se dejó de lado el control, ni nos dimos cuenta que todos
nosotros nos relajamos y dejamos de lado el cuidado básico o tienen que morir
más personas para que nos aterremos y volvamos a exagerar con la protección
nuestra y la de nuestras familias.
Vacuna contra la
mala educación a todos para que recordemos que está en nuestras manos el que
deje de morir tanta gente.
CON LLAJUITA
CLAUDIO ROJAS V.
Periodista y docente universitario
claudiorojasprensa@hotmail.com.
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