Bertha Torrez fue sentenciada a 30 años de prisión, pero la Justicia la había favorecido con derecho al trabajo y detención domiciliaria.
“(El hombre) ha sido víctima de un asesinato. Le han ahorcado y, en complicidad con sus familiares, en un vehículo familiar lo han conducido a un lugar que no era concurrido y ha querido aparentar que ha sido víctima de unos cogoteros”, dijo Jhonny Rivas, abogado de la familia.
La mujer fue recapturada la mañana de este miércoles, y luego enviada a la cárcel de Obrajes. La Policía la sorprendió cuando ejercía su trabajo en un colegio de La Paz.
Se conoce que dictaba clases a niños de primaria y que tenía denuncias sobre maltrato psicológico a sus estudiantes. No obstante, las autoridades no habrían tomado cartas en el asunto, según el abogado de los padres de familia, Miguel Ángel Maidana.
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