El Pleno del Consejo de la Magistratura tomó la determinación de intervenir desde este miércoles los 21 juzgados disciplinarios del país, informó su presidente Marvin Molina.
Lo que significa “que vamos a revisar absolutamente todos los casos que tienen los jueces disciplinarios en Bolivia, tomando en cuenta, primero, el número de casos pendientes que tienen y el cumplimiento de los plazos procesales”, agregó.
Molina afirmó que no puede ser que este país continúe teniendo jueces disciplinarios que tardan, según su versión, más que en los procesos penales.
Tardan “dos años, tres años, (y las) sanciones ya no se pueden ejecutar porque los servidores o ya no son servidores judiciales o en su caso han sido promocionados (…) vulnerando, incluso, los derechos constitucionales de los procesados, y lo peor es que se deja en la impunidad varios de estos procesos”, lamentó.
El Presidente de la Magistratura añadió que por honestidad se dará el beneficio de la duda porque hay un principio constitucional de presunción de inocencia.
Sin embargo, “a todas luces, no creemos que (por ejemplo) en el distrito judicial de Santa Cruz, donde tenemos la mayor cantidad de jueces, casi al nivel del distrito judicial de La Paz, no existan faltas gravísimas en 2018, 2019, 2020, 2021 y (en lo que va de) 2022”, señaló.
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