Al igual que sucedió en 2019, cívicos y ciudadanos se congregan al comenzar la noche para conocer novedades sobre la medida
Al comenzar la noche del segundo día de paro, los
vicepresidentes del Comité Cívico acudieron a los pies de El Cristo Redentor
para brindar su evaluación de la medida de presión, en demanda de la
realización del Censo de Población y Vivienda en 2023. El gobernador Luis
Fernando Camacho esta vez sí hizo uso de la palabra en la testera: "No nos
vamos a sentar en mesas técnicas porque eso ya pasó", manifestó.
Nos podemos sentar, sin ningún problema, cuando abroguen el
decreto (4760). Presidente, deje de mandar a gente incompetente, venga usted
personalmente, no sea cobarde. Santa Cruz es y va a seguir siendo la locomotora
de la economía y la locomotora de la democracia, porque aquí se prende la llama
para todo Bolivia", fustigó, dicendo que "este pueblo no se va a ir a
su casa si no tenemos censo en 2023.
La jornada estuvo marcada por la detención de dirigentes
cívicos de Puerto Quijarro, acusados del deceso de un ciudadano, en
enfrentamientos de esa zona durante el primer día del paro cívico.
El Cristo fue el punto de encuentro de la ciudadanía y los
cívicos, durante los 21 días de paro de 2019; cada noche, el presidente cívico
se dirigía a la población para hacer un
recuento de lo sucedido a lo largo de la jornada y de los avances en las
demandas propuestas. En este 2022, el procedimiento se repite.
El vicerrector de la Uagrm, Reinerio Vargas, en su
intervención dijo que no levantarán el paro y que se encuentran fortalecidos
pese a que fracasó el diálogo.
Por su parte, Susy Montaño, presidenta del Comité Cívico
Femenino, aseguró que ayer "perdieron el tiempo" en una mesa de
diálogo sin voluntad política para resolver el conflicto.
"Los cruceños asistimos sinceros como somos y no
obtuvimos absolutamente nada. No quieren que tengamos salud, educación y los servicios
básicos. Sigamos velando por el futuro de nuestras familias", sostuvo.
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