David Taborga también contó que la Alcaldía de Puerto Quijarro obligó a los funcionarios a protestar contra el paro cívico, incluso reveló que pagaron a brasileños y a ayoreos.
David Taborga, hijo de Julio Taborga, muerto el 22 de octubre durante un enfrentamiento entre quienes apoyan y rechazan el paro indefino, develó que su progenitor murió a causa de un gas lacrimógeno, que los funcionarios de la Alcaldía de Puerto Quijarro fueron obligados a enfrentar a los cívicos y que los detenidos son inocentes.
David vio el momento en el que su padre habría sido mortalmente afectado por un gas lacrimógeno que fue lanzado por la Policía, reveló este lunes en una conferencia de prensa. Fue presentado por el abogado Jorge Valda, quien dijo que el testimonio debe obligar a liberar a Rubén Mario Flores, Samuel Rojas detenidos en Palmasola y a Jaime Algarañaez que se encuentra en el hospital.
“Mi padre falleció trágicamente, dicen que, por golpe en la cabeza, pero es mentira yo estuve ahí presente. Mi padre murió por el gas (de) la granada que lanzó la policía, mi padre quiso alzar la granada que se salió el aire con presión que se le vino a la cara y se quedó tumbado”, contó el hijo de Julio Taborga quien era funcionario de la Alcaldía de Puerto Quijarro.
El joven dijo que le duele la muerte de su padre, desea que descanse en paz y que se haga justicia, por eso mismo dijo que los cívicos detenidos tras la muerte de su padre son “inocentes” y que no estuvieron el momento en el que su padre quedó tumbado en el suelo.
“No hubo esos hechos que dijeron que lo apalearon (…) Me duele la pérdida de mi padre, me duele mucho, (pero) esa gente es inocente. En ningún momento vi la presencia de ellos”, en relación a los cívicos que el Ministerio Público mandó a aprehenderlos.
Relató que dos funcionarios de la Alcaldía, un hombre y una mujer, de los que desconoce sus nombres, pero que los podría reconocer fueron los que instruyeron que los funcionarios asistan a la movilización, asimismo, se les ofreció un pago de Bs 150 y de Bs 250.
Por esa razón dijo que a las 22:00 del 21 de octubre, llegaron a un punto de encuentro donde llegaron motoqueros, brasileños, incluso ayoreos, para quienes “la instrucción era que no haya paro. Les dijeron te vamos a pagar 250 bolivianos, se vieron adelante los brasileños”.
Contó que quienes no asistían a la protesta contra el paro serían sancionados, por esa razón su padre tuvo que asistir a ese llamado. “Es una injustica que esos hombres estén en la cárcel, y quiero justicia por mi padre que descanse en paz”.
Sin embargo, la autopsia al cuerpo de Taborga establece que murió a causa de un golpe en la cabeza, específicamente se identificó un “hematoma subdural, traumatismo cráneo encefálico cerrado y politraumatismo”.
El abogado Valda dijo que el testimonio del hijo de Taborga es fundamental para que la Justicia determine de manera inmediata la libertad de los imputados, porque existe suficiente evidencia de que sus defendidos son inocentes.
Asimismo, dijo que presentará como prueba un teléfono celular de un funcionario de la Alcaldía en el que se puede advertir que en el grupo de whatsapp de esa entidad estatal está claramente la organización para que los funcionarios salgan a enfrentar a los cívicos ese 22 de octubre.
ANF
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