Comerciantes que trasladan productos argentinos en flotas se sintieron seguros al lograr pasar los controles de Campo Pajoso y Abapo, sin embargo cuando llegaron a la terminal de buses de la capital cruceña, grande fue su sorpresa que personal de la Aduana Nacional de Bolivia que los esperaban para decomisar los productos, apenas bajaron a querer descargar su mercadería.
Comerciantes pedían con suplicas al personal que realizaba el decomiso que no les quitaran su mercadería, ya que debido a la escases de fuentes laborales decidieron optar por este modo de ganar dinero para poder sustentar sus familias.
En el momento del decomiso, no se pudo observar cantidad ni especificar los productos que fueron quitados pro los trabajadores de la Aduana, ya que se encontraban cubiertas en bolsas de yute.
El decomiso se realizó entre empujones e insultos de los dueños de dichos productos y los servidores públicos de la Aduana.
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