El caso salió a la luz luego que el padrino del niño revisó el celular y encontró conversaciones en las que evidenció -incluso- que el sindicado había logrado pactar una reunión con la víctima. Fue aprehendido y puesto a disposición del Ministerio Público por el presunto delito de corrupción de menores.
“Es obligación de todos los padres revisar los celulares de todos los niños y adolescentes. El papá tiene que controlar y verificar con quienes se están contactando sus hijos”, recomendó el jefe policial anticrimen.
Este es el segundo caso que se investiga por corrupción de menores en Tarija, toda vez que en pasadas horas la FELCC capturó en flagrancia a un hombre de 52 años, cuando intentaba recoger a una adolescente de 14 cuando salía de clases para llevarla a un motel, ofreciéndole 100 bolivianos.
El operativo de la captura se ejecutó en el barrio Las Panosas, a la altura de la avenida Víctor Paz y Suipacha, donde el sindicado que responde a las iniciales J.B.Y. quiso subir a la víctima a su vehículo.
El País
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