“Si se identifica la comercialización de carne bovina de origen argentino en mercados, centros de abasto o friales, será susceptible a decomiso directo y posterior destrucción, toda vez que a nivel nacional no existe un importador legalmente autorizado para la distribución y comercialización del producto”, informó Elizabeth Santos, responsable de la Oficina de Defensa al Consumidor.
Desde el 1 de diciembre, se realiza un control intensivo de los abarrotes en los mercados municipales y tiendas de barrio, para verificar que los productos expendidos cumplan con las garantías: fecha de vencimiento adecuada, buena conservación y almacenamiento además de una buena manipulación de los expendedores de consumo directo, los vendedores ambulantes y de puesto fijo, verificando que utilicen sus uniformes y porten el carnet de salubridad.
Santos señaló que, en las panaderías, se realizan las verificaciones de los insumos e ingredientes que utilizan para la preparación de panetones. Indicó, que todos los comerciantes de alimentos, tienen la obligación de expender productos garantizados y dejar ingresar al personal de ODECO a que puedan verificar los productos.
Finalizó instando a la población que, a la hora de comprar, se tomen el tiempo de verificar los productos, y si encuentran irregularidades, las hagan conocer a la oficina de ODECO, ubicada en el segundo piso del Mercado Lourdes, o den parte también a los intendentes o guardias municipales, para que se tomen las medidas correspondientes.
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