El denominado paciente 0, que falleció hace más de 18 días, y de acuerdo al reporte del Cenetrop (Centro de Enfermedades Tropicales) falleció por Covid-19, lo convertió en la primera persona en todo el departamento de Tarija donde el virus tomó su vida, sin embargo, su hermano Fernando Osinaga, aseguró no creer en estos datos, debido a que él y otras personas tuvieron contacto directo y hasta el momento no presentan ningún síntoma.
“Los resultados que presuntamente eran positivos, ahora son negativos, ya pasaron los días para que nosotros podamos ser sintomáticos a este virus y nosotros nos encontramos bien, nosotros fuimos los que estuvieron en contacto directo con él (+) y es por eso que nosotros pedimos que se esclarezca esta situación”, expresó.
Luego de conocerse de la muerte de esta persona, los contactos directos fueron enviados al asilo de ancianos ubicado en la localidad de El Palmar, donde cumplieron su aislamiento por 14 días, los mismos, una vez que se les tomó la muestra y dieron negativo, fueron dados de alta.
Pero, ¿De qué murió el paciente 0?, y la respuesta de Osinaga fue que su hermano, ya presentaba una enfermedad de base desde hace tiempo, problemas en los pulmones, y aclaró que nunca presentó síntomas de coronavirus, por lo que reiteró a las autoridades que hagan el seguimiento respectivo y se sepa la verdad de lo sucedido.
Pero la historia no termina ahí, ya que estos familiares y vecinos de una vivienda particular donde el paciente 0 alquilaba una pieza en el barrio Las Delicias, fueron víctimas de discriminación desde el día de su muerte. “Fue todo un calvario, hemos sido víctimas de discriminación”, dijo Osinaga.
La propietaria de la casa, Jacinta Garnica, explicó su molestia ante los medios de comunicación de todo el calvario que le toca vivir, ya que actualmente sufre por la discriminación que es víctima durante todos estos días por parte de sus vecinos y que además ya nadie se acerca a su casa a comprar a su venta.
“Yo tengo mi puesto de venta de pan, pero ya la gente no viene, ni se acerca, se van por otro lado, por otra calle, ni siquiera me hablan, estamos viviendo bastante feo en este barrio y estamos siendo discriminados totalmente, queríamos salir a comprar pan para nuestros hijos ya los vecinos nos gritoneaban”, manifestó la angustiada vecina.
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