Los brigadistas lograron detectar varios hechos irregulares y dieron parte, para que los responsables del programa realicen terapia psicológica e informen del caso a las instancias correspondientes para el seguimiento del caso.
Estos estudiantes voluntarios de varias unidades educativas, fueron capacitados en temáticas de seguridad ciudadana, autoestima, valores rurales, bullying, trata y tráfico de personas, aborto, abuso sexual y otros de prioridad para la adolescencia y la juventud estudiantil.
“Las brigadas se transforman en los ojos y brazos operativos de los profesores y directores dentro de sus unidades educativas. La dirección de Seguridad Ciudadana realiza la capacitación, identificación y notificación a la instancia que corresponde, como ser la Mesa Defensorial y la Policía Boliviana”, relató Cruz.
El objetivo de las Brigadas Escolares es prevenir actos de violencia y otras problemáticas frecuentes en los estudiantes, contribuyendo a fortalecer la seguridad en las unidades educativas de los barrios y las comunidades, para que nada interrumpa la formación escolar. Además, replican los conocimientos adquiridos con sus compañeros, padres de familias, y las personas de su alrededor.
El Gobierno Regional entregó una remera, una gorra y un chaleco a cada brigadista que haya cumplido con los cursos de capacitación, para diferenciarse de los demás estudiantes e impartir orden y control dentro de las unidades educativas.
Cruz destacó que la presencia de este contingente en los establecimientos educativos, permitió actuar oportunamente en situaciones complicadas y evitar mayores consecuencias. “Estamos tratando de reducir los casos de violencia y otras situaciones que se presenten, para que no surjan problemas en las unidades educativas”.
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