Un joven de 22 años de edad perdió la vida, aparentemente producto del disparo de un arma de fuego de uso oficial empleada por un grupo de militares del Comando Estratégico Operacional (CEO), que supuestamente lo confundió con un contrabandista.
El hecho provocó la reacción de los pobladores de Huachacalla del departamento de Oruro contra los integrantes de la patrulla del Ejército, que quemaron un puesto de control militar.
El fiscal departamental de Oruro, Iván Azurduy, citado por radio Fides, confirmó el deceso.
“Hubo un enfrentamiento, fruto de esto lamentablemente falleció una persona”, manifestó Azurduy e informó que se dispuso que el fiscal asignado a la localidad de Huachacalla se constituya de forma inmediata.
Iba en un auto
Algunas versiones señalan que el joven y su familia llevaban al interior del vehículo mercadería de contrabando y que no se detuvieron en el puesto de control para la requisa correspondiente y que por ello los uniformados procedieron a disparar.
Sin embargo, otros pobladores aseguran que el vehículo en el que viajaba el ahora difunto es legal y que no había ninguna irregularidad por lo que responsabilizaron de la tragedia a los miembros de la institución castrense.
Tras confirmarse la muerte del muchacho, los pobladores reaccionaron con violencia y quemaron el puesto de control, exigiendo justicia y el repliegue de los militares. Aún se espera el informe oficial por parte de las autoridades y el resultado de la autopsia practicada al cuerpo del joven para determinar la causa exacta de la muerte.
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