De forma preliminar, El País conoció que durante una reciente encuesta demográfica de salud realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en la ciudad de Tarija, se han descubierto datos preocupantes con relación a la falta de yodo en la sal, un mineral esencial para el metabolismo y la salud humana. Esto plantea serias inquietudes sobre la salud pública y la necesidad de garantizar que las empresas certificadas cumplan con los estándares requeridos.
La importancia del yodo en la dieta humana no puede
subestimarse. Este mineral es crucial para el funcionamiento adecuado de la
glándula tiroides y el metabolismo, y su ausencia puede llevar a trastornos
graves como el bocio, el cretinismo y el retraso mental, según informó a El
País Zulma Miranda, responsable de Inocuidad Alimentaria de la Intendencia
Municipal de Tarija.
Erlan Condori, supervisor operativo del INE en Tarija,
informó que la encuesta aún está en proceso y que no se dispone de datos
finales sobre esta situación. Sin embargo, Miranda confirmó que en inspecciones
previas se pudo constatar que la mayoría de las empresas no cumplían con el
porcentaje de yodo en la sal.
Miranda explicó que los resultados de los análisis que se
realizan son variables, debido a que algunas empresas cumplen con los
estándares en ciertas ocasiones y en otras no. Esta variabilidad en el
cumplimiento es una preocupación significativa, ya que la falta de yodo en la
alimentación puede tener consecuencias graves para la salud pública.
Ante esta situación, se ha sugerido que el Servicio Nacional
de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) y la Defensa al
Consumidor que realicen controles rigurosos en las instalaciones de producción
de sal.
Marcas certificadas
En julio, el Ministerio de Salud presentó las marcas de sal
que cumplen con la fortificación de yodo, después de inspeccionar 42 plantas
salineras en La Paz, Oruro y Potosí. Además, se han llevado a cabo talleres de
concientización dirigidos a los productores de sal.
Según datos de la Unidad de Alimentación y Nutrición del
Ministerio de Salud, de las 7.195 muestras de sal analizadas, el 60,1% no
cumple con las normativas, lo que preocupa. Por otro lado, el 38,8% de las
muestras están dentro del rango de fortificación.
Algunas marcas de sal de La Paz, Oruro y Cochabamba como el
Universal, Perla Andina, Súper Sal Salud, Niño Salvador, Universo, Condorito,
Chef-sito, Niki-Sal, Prebosal, Finisal, Purasal, El Salerito, Salsita, y la
marca Lobos de Chile cumplen con los niveles de fortificación requeridos,
mientras que la situación de las marcas tarijeñas aún es desconocida.
Peligros por la deficiencia de sal yodada en la salud
La deficiencia de yodo puede tener graves consecuencias para
la salud. Cuando falta yodo, la glándula tiroides puede agrandarse (bocio) en
un intento de captar más yodo para producir hormonas tiroideas. Esto puede
llevar al hipotiroidismo, que causa una serie de problemas, como piel hinchada,
voz ronca, deficiencia mental, cabello escaso y áspero, intolerancia al frío y
aumento de peso. Además, la fertilidad se ve afectada.
Las mujeres embarazadas que carecen de yodo enfrentan un
mayor riesgo de aborto espontáneo y muerte fetal. Los bebés afectados por la
deficiencia de yodo pueden experimentar un crecimiento lento y un desarrollo
cerebral inadecuado, lo que puede resultar en retraso mental, estatura baja,
sordera, mutismo y defectos congénitos.
Para evitar estos riesgos, la Unidad Nutricional del
Municipio de San Lorenzo, Tarija, recomienda mantener el frasco de sal con tapa
cerrada, abrirlo solo al momento de agregar sal a la comida y no poner arroz en
el salero, ya que esto puede causar la pérdida de yodo.
El País
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