El Exfiscalizador de la Aldeas de Niños Padre Alfredo, Claudio Caiguara Romero, fue sentenciado a 15 años de cárcel luego de ser hallado culpable del delito de violación contra una niña huérfana albergada en este centro.
La sentencia fue emitida por voto unánime por el tribunal
integrado por los jueces Charlin Tapia, René Quezada y Angélica Sánchez.
El fallo fue calificado de débil y benevolente por la
defensa de la huérfana, la abogada Mileny Sánchez y por la Casa de la Mujer, a
través de María Daza.
Se trata de la segunda sentencia por violación a niñas
huérfanas contra Claudio Caiguara, que siendo el protector se convirtió en su
verdugo. En la primera fue condenado a 20 años de cárcel en septiembre de 2022,
al ser hallado culpable de violación a una niña de 11 años, a la que sometía a
vejámenes desde sus 9 años.
El segundo fallo emitido ayer tiene su origen en la gestión
de 2019, cuando según la acusación formal de la Fiscalía, a cargo de Mabel
Andade, el exfiscalizador Caiguara, saca con engaños a su víctima del hogar y
la traslada con su chofer hasta Corumbá (Brasil) mintiendo que debía de
regularizarle sus estudios. En esa ciudad mientras su chofer sale a cargar
combustible al motorizado, el hombre la abusa sexualmente.
De acuerdo a la Fiscalía, Caiguara, fue denunciado por su
chofer y la víctima y luego la Policía de Brasil investigó el caso, fue detenido
y trasladado a Santa Cruz.
La Fiscalía en su acusación expuesta en el juicio oral,
presentó pruebas documentables, periciales y testificales y pidió la aplicación
de la máxima pena de 25 años de cárcel.
Las defensoras de la víctima, Mileny Sánchez y María Daza de
la Casa de la Mujer, coincidieron en afirmar que conseguir la sentencia fue una
batalla dura y penosa.
Pusieron como ejemplo la semana pasada en el inicio del
juicio oral, cuando los jueces René Quezada y Angélica Sánchez sacaron de la
audiencia a la defensa exigiendo un poder para representar a la víctima. Las
abogadas salieron para ir a conseguir el poder, pero la huérfana abusada no
tenía dinero para pagar la diligencia y cuando llegó a la audiencia, fue
obligada a ingresar y enfrentarse con su verdugo acusado.
La joven violada finalmente salió de la audiencia llorando
ante la mirada de los jueces, del acusado y abogados. “Fue un acto doloroso,
desleal e insensible de los jueces a la víctima en lugar de protegerla. No solo
hemos confrontado con los jueces, sino con el acusado que durante casi cinco
años puso trabas, mentiras, para alargar el proceso y burlarse”, dijo Mileny
Sánchez.
En todo el juicio oral de este segundo proceso contra
Caiguara, participó como veedor un representante del Defensor del Pueblo que
tomó nota de todos los pasos, la angustia y el sufrimiento de la víctima en
busca de justicia.
Caiguara, antes del fallo se declaró inocente y habló de la
Biblia. Sin embargo, pese a las sentencias de 20 años y esta última de 15,
Claudio Caiguara, goza de libertad, pues la justicia no emite orden de
detención y argumenta que se deben cumplir pasos procesales para no vulnerar
los derechos del sentenciado.
Está preso por narcotráfico
Claudo Caiguara está detenido en la cárcel de Palmasola por
narcotráfico. La Fuerza especial de Lucha Contra el Narcotráfico lo capturó el
año pasado cuando en el paro cívico una ambulancia de la Aldea Padre Alfredo es
retenida en Pailón cargada con precursores químicos para un laboratorio por San
José de Chiquitos. Según las Felcn, la ambulancia salió por orden de Caiguara.
Jerjes Justiniano Talavera, del directorio de la Aldeas
Padre Alfredo, consideró que esta institución noble de servicio a los huérfanos
está siendo destruida por Caiguara y sus seguidores.
El Deber
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