“Esta es una iniciativa productiva que servirá como ejemplo y parcela piloto para todas las familias del área urbana. Sabemos que estamos atravesando una crisis económica y alimentaria, no solamente en la región; sino, en todo el país, y creemos que lo más importante es pensar en la seguridad alimentaria, porque para luchar contra las enfermedades la alimentación es la base”, agregó Cruz.
Bajo estos principios, los técnicos están trabajando, con todas las medidas de bioseguridad, en la construcción de un huerto modelo y piloto para todas las familias de la ciudad que deseen producir dentro de sus viviendas. En esta parcela serán desarrolladas diversas metodologías de cultivo, utilizando envases reciclables como las botellas de plástico, bidones, cubiertas de vehículos y otros.
En esta experiencia para que las familias de los barrios puedan producir sus propios alimentos, se desarrollarán también las técnicas de clasificación y reciclado de basura, principalmente orgánica, que sirve para la producción de hortalizas. Estas y otras actividades están definidas en la planificación semana de la institución, para que sean desarrolladas hasta el periodo de ejecución con las familias.
El compromiso del Seragro es informar a todas las familias que estén interesadas en implementar esta iniciativa para la producción de unas 15 hortalizas, clasificadas como de primera necesidad porque generalmente son compradas todos los días en los mercados y que están presentes cotidianamente en la mesa. Se habla de promover la siembra de tomate, cebolla, pimentón y perejil entre otros.
Finalizando, Cruz afirmó que el cultivo de las hortalizas tiene la cualidad de adecuarse a cada contexto y dimensión de superficie. “Entonces acá las familias podrán ver en los hechos, cuáles son los resultados y optar por uno u otro sistema o metodología de producción dependiendo del espacio”, dijo.
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