Sin presentar pruebas, el ministro de Educación, Edgar Pary, acusó este domingo a la Resistencia Juvenil Cochala y a la Resistencia Juvenil Cruceña de financiar la movilización del Magisterio Urbano, advirtió que estas acciones buscan convulsionar al país.
La autoridad afirmó que la dirigente del Magisterio de Cochabamba era integrante de la Resistencia Juvenil Cochala, aseguró que las medidas de presión de ese sector son similares a las protestas que protagonizaron las resistencias juveniles en 2019.
"Hay una compañera que ha sido la líder de las motoqueras, ahora es dirigente de la Federación Departamental Urbana de Cochabamba. Ella está encabezando el movimiento. Entonces, ¿Qué significa? Que de ambas partes (ambas resistencias) están alimentando para convulsionar el país y con seguridad lo dijo el profesor Salazar y hoy lo están cumpliendo", aseguró la autoridad en entrevista con medios estatales.
Desde la semana pasada, la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB) se movilizaron exigiendo la atención al pliego de 200 puntos, donde también rechazan la implementación de la malla curricular. Sus protestas en la sede de gobierno terminaron en enfrentamientos con la Policía.
Tras el fallido diálogo, la dirigencia decidió que los maestros retornen a sus regiones para iniciar con el bloqueo de caminos y protestas en cada ciudad. Para el miércoles se prevé una movilización en todo el país.
El dirigente del Magisterio Urbano de La Paz, José Luis Álvarez, anunció que las medidas de protesta se radicalizarán hasta que el Gobierno los escuche. Mientras que el ejecutivo de los maestros de Santa Cruz, Osman Cabrera, advirtió con enviar una comitiva de profesores a la sede de gobierno para continuar con las protestas.
"Lo primero que vamos a hacer es un informe general y vamos a bloquear las principales avenidas de la ciudad y vamos a reorganizar para la siguiente semana, si es posible, para mandar un contingente a La Paz y otras medidas en Santa Cruz", adelantó Cabrera.
Sobre los ítems, Pary dijo que este año entregaron 2.500 cupos y en dos años y medio de gestión suman 7.500 puestos, que pretenden distribuir en coordinación con los directores departamentales.
El Gobierno reiteró sus intenciones de entablar un diálogo, pidió a los maestros sentarse en la mesa dejando de lado todo tipo de interés político y personal.
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