Ayer, el ministro de Defensa, Fernando López, junto a autoridades regionales y locales, visitó las instalaciones de campo ferial y el campus universitario con el objetivo de definir el lugar donde podrán ofrecer a las 500 personas que retornan a Bolivia, alojamiento, alimentación, servicios básicos y atención médica; definiendo que el último se adecúa a las exigencias de un campamento.
El ministro explicó que llegó a la región para coordinar el ingreso de los compatriotas velando por la vida y la salud de los bolivianos; para ese fin sostuvo una reunión con el nivel regional y municipal, programando el acondicionamiento de los ambientes del campus universitario, hasta que cuente con todo lo necesario para garantizar una barrera epidemiológica contra el coronavirus (COVID-19).
También afirmó que velará por el cumplimiento de los protocolos emanados desde el nivel nacional, sobre la base de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), para el retorno de los compatriotas, reduciendo al mínimo los riesgos de un posible brote del COVID-19 en la región, toda vez que la cuarentena, el aislamiento social y cerco territorial lo mantiene sin casos positivos.
Las acciones, según la autoridad, se ejecutan en el marco de la emergencia sanitaria nacional que obliga a todas las entidades públicas a coordinar y prestar su colaboración con las distintas Carteras de Estado y las Entidades Territoriales Autónomas, para disponer y utilizar los bienes y servicios necesarios que garanticen la lucha contra el contagio y propagación del coronavirus (COVID-19).
Concluyendo, la autoridad asumió que un equipo técnico del Gobierno Nacional y el COEM, definirán la forma en que se acondicionarán los ambientes, cumpliendo los requisitos de sanidad y salubridad. Una vez concluido, un equipo especializado se haga cargo de la administración del campamento.
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