El próximo 11 de abril se realizará la segunda vuelta presidencial en el
Ecuador, la elección presidencial en el Perú, la elección de constituyentes,
gobernadores y alcaldes en Chile, y la segunda vuelta para la elección de
gobernadores en los departamentos de Chuquisaca, La Paz, Pando y Tarija, en
Bolivia. En todas ellas el elemento común es la desinstitucionalización del
sistema político y la confrontación entre las corrientes democráticas y el
llamado Socialismo del Siglo XXI, aglutinado en el Foro de San Pablo,
renombrado como Grupo de Puebla.
En el Ecuador se enfrentarán la opción democrática y el intento del
chavismo internacional de retomar un país que perdieron debido a la ruptura
entre el presidente Lenin Moreno y su anterior jefe, Rafael Correa. No hay duda
que es una elección trascendental para la consolidación democrática en el
Ecuador, lo cual solo será posible si gana el candidato que representa a las
fuerzas democráticas, Guillermo Lasso.
Andrés Arauz, el candidato correísta, ganó la primera vuelta con el
32,72%. Guillermo Lasso, de centro derecha, logró el pase a la segunda vuelta
con el 19,74% de los votos, consiguiendo el segundo lugar después de una
ajustada competencia con el candidato indígena Yaku Pérez, el cual quedó
tercero con el 19.39% de los votos. No muy distante había quedado el empresario
Xavier Hervas, con el 15,68%. Los últimos sondeos de las consultoras independientes
proyectan un resultado muy ajustado, aunque con una ligera ventaja para
Guillermo Lasso.
En el Perú, las encuestas han coincidido a lo largo de la campaña en el
bajo porcentaje de apoyo de los 18 candidatos, de los cuales, quienes se han
alternado en el primer lugar apenas pasan del 10%, lo que refleja la alarmante
desestructuración y pérdida de credibilidad de su sistema político.
La incertidumbre es la nota predominante en las encuestas publicadas por
los principales periódicos que coinciden con un empate estadístico de cinco
candidatos, a una semana de las elecciones. Según El Pais de España, estos
serían Johnny Lezcano, Hernando de Soto, Veronika Mendoza, Keiko Fujimori y
Rafael Lopez. Este medio los define como tres opciones de derecha (De Soto,
Fujimori y López) una de izquierda (Mendoza) y un populista (Lezcano). Todas
estas candidaturas estarían entre el 10% y el 8%, de las cuales los dos
primeros irán a la segunda vuelta.
Las elecciones en Chile seguramente serán postergadas debido al alarmante
incremento de contagios por la Covid-19 experimentado en las últimas semanas, a
pesar de una exitosa campaña de vacunación. Se prevé que la postergación de las
elecciones será aprobada por el Congreso.
De las tres elecciones por la cual votaran próximamente los chilenos,
las más trascendentales será la de los constituyentes, quienes deberán redactar
una nueva constitución como respuesta a los graves y violentos conflictos
sociales que sufrió ese país en el 2019. Lo más llamativo es que siendo Chile el
país que más ha disminuido los niveles de pobreza en América Latina, enfrente
un nivel de descontento social que marca de incertidumbre su futuro, lo que
comprueba la capacidad desestabilizadora de las organizaciones ligadas al
chavismo.
En Bolivia, el MAS debiera perder las cuatro elecciones pendientes para
definir los gobernadores. En Chuquisaca, Pando y Tarija, quienes salieron
terceros representan opciones claramente adversas al MAS y obtuvieron más votos
que los que se necesitarían para que las fuerzas opositoras al oficialismo
ganen la segunda vuelta. Quizás la competencia más ajustada sea La Paz, aunque
si Santos Quispe, de Jallalla, recibe los votos que beneficiaron a Rafael
Quispe y otras opciones opositoras, pasaría del 50% y ganaría la segunda vuelta
al partido de Evo Morales.
El 11 de abril, Ecuador y Perú definirán su futuro, Chile esperará
algunas semanas y Bolivia tendrá la oportunidad de continuar demostrando su
rechazo a la concentración del poder.
El autor fue presidente del Senado y ministro de Economía.
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