Tras meses de investigación, la nadadora boliviana María José Ribera Pinto anunció en sus redes sociales que su caso de dopaje llegó a su fin, confirmando que nunca consumió de manera voluntaria la sustancia que derivó en su resultado positivo.
Según explicó, todo se debió a una contaminación en un
suplemento "El resultado se debió a una contaminación en un suplemento,
producto de una sustancia no permitida que fue añadida sin mi conocimiento”.
La deportista describió este periodo como uno de los más
difíciles de su vida: “Han sido meses de angustia, de dudas, de audiencias, de
defender mi verdad una y otra vez, ha sido una de las pruebas más duras de mi
vida”.
Con la sanción ya publicada y la aclaración de su inocencia,
Ribera expresó sentirse aliviada: “Siento una mezcla de alivio, paz y lágrimas
contenidas”.
Ribera agradeció a quienes confiaron en su palabra y la
apoyaron incondicionalmente durante todo el proceso, mencionando a su familia,
amigos, equipo y patrocinadores. “Gracias por creer en mi palabra cuando era lo
único que tenía”, destacó la nadadora, quien reconoció que ese respaldo fue
fundamental en los meses más difíciles.
La atleta cerró su mensaje asegurando que este capítulo
queda atrás y que vuelve más fuerte, consciente y con la misma pasión, lista
para enfocarse en sus próximos desafíos y seguir representando a Bolivia en
competencias internacionales.
El Deber
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