El ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, informó ayer que las incautaciones de combustibles líquidos llegan a 347.218 litros, de los cuales el 90 por ciento era diésel transportado de manera ilegal por distintos puntos del país y puestos fronterizos.
La autoridad dijo que la meta para este año es ahorrar 250 millones de dólares que salen en calidad de contrabando hacia otros países, aprovechando el precio subvencionado de los combustibles líquidos.
Explicó que el Plan Soberanía y las acciones de implementación, registro y control de combustibles, en virtud al decreto 4910 y 4911, permiten desarrollar distintos operativos, como el de Guayaramerín, donde una comitiva fue agredida por personas inescrupulosas.
Molina pidió a la población colaborar con estos operativos denunciando las actividades ilegales, porque los recursos de los impuestos se destinan a la compra y abastecimiento de combustibles.
La autoridad manifestó que, hasta el momento, se han logrado importantes avances en términos de resultados, porque, además de las incautaciones líquidas, se decomisaron 15 tanques, varios camiones, cisternas, y se intervinieron algunas estaciones de servicio. También se incautaron 264 garrafas de GLP y 664 instrumentos de actividades ilegales.
Afirmó que realmente se necesita ajustar los mecanismos de control, porque en otros países también se está registrando desabastecimientos de combustible, como en Miami, EEUU, país que curiosamente es productor de petróleo.
Molina indicó que al parecer no se han medido las consecuencias de la guerra en Ucrania. Esta situación confirma que Rusia sigue siendo uno de los principales productores de petróleo y derivados, lo cual está generando un desequilibrio en el abastecimiento en otros países.
Dijo que, por ese motivo, en el país el abastecimiento tiene que ser fiscalizado.
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