El fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina, informó que solicitarán que tanto Ramiro G.Ch., capitán del Ejército, como su esposa Rocío Ch.A. y su suegra Alicia A.H. sean detenidos de manera preventiva en cárceles por los delitos de trata de personas y lesiones graves y gravísimas.
Esto se debe a que las tres personas fueron aprehendidas el lunes 14 de octubre, luego de que se descubriera que, según información proporcionada por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Freddy Medinacelli, Alicia (de 45 años) trasladó a una niña de 12 años desde la comunidad de Anzaldo hasta la ciudad de Cochabamba bajo engaños. Alicia convenció a los padres de la menor de edad de que su hija estaría en buenas manos con su hija y su esposo (Ramiro y Rocío, de 36 y 25 años), quienes la “cuidarían, vestirían y le brindarían la oportunidad de estudiar”.
Les aseguró que la niña solo tendría que ayudar con tareas domésticas básicas y que, por ese trabajo, le pagarían 900 bolivianos mensuales.
Según Tejerina, la víctima había estado con esa familia durante al menos ocho meses y nada de lo prometido se cumplió. La niña sufría violencia física, presentando heridas de data antigua, de más de 90 días, así como lesiones recientes.
No asistía a la escuela, no la dejaban salir y no podía descansar adecuadamente por las noches, ya que la sobrecargaban con quehaceres del hogar, además de golpearla.
A raíz de las lesiones, el médico forense estableció nueve días de impedimento; sin embargo, no habría considerado las lesiones de data antigua, por lo que se prevé que ese número se amplíe. Este caso se encuentra actualmente bajo investigación.
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