La aprehensión de un hombre acusado de violar y embarazar a una niña de 11 años terminó con el tormento de la víctima. Ella no solo demuestra sentirse tranquila, sino con esperanzas que no volverá a ser violentada. "Mamá vamos a salir adelante", expresó la niña luego de que la Policía se llevara a su padrastro.
El hecho fue descubierto el martes en Santa Cruz de la
Sierra, cuando la mamá de la niña llevó a su hija, primero donde una amiga que
es enfermera, por los dolores estomacales que presentaba. Le sugirieron que se
haga una ecografía y es ahí que, frente a la especialista, descubrieron el
embarazo.
La mamá relató que quedó en shock tras saber que su pequeña
hija de solo 11 años se encontraba embarazada. La mujer le pidió a su hija que
le cuente quién era el papá del bebé, pero se quedó en silencio. La mujer buscó
que su amiga converse con la niña y es ahí que, con temor, miedo y llanto,
confesó que su padrastro la había violado.
Al enterarse que su pareja había abusado a su hija, se
movilizó para ubicarlo. El hombre se encontraba trabajando justo con el papá de
la mujer, es así que lograron ubicarlo y junto a la Policía se trasladaron y lo
aprehendieron.
"No lo podía creer, nunca me di cuenta. Pensé que mi
hija tenía un tumorcito en la barriga porque apenas tiene once años. Tal vez no
me dijo nada por miedo", indicó la mamá de la víctima.
Son dos menores de edad las hijas de la mujer, una de 14
años y la última de 11, quien fue abusada por su padrastro. En tanto, tras el
hecho, la mamá consultó a la mayor si había sido violentada; sin embargo, ésta
aseguró que nunca ocurrió nada y que tampoco podía creer que su hermanita
estaba embarazada, producto de un abuso sexual.
"Mi hija siempre fue callada, aunque la noté un poco
distraída y pensé que era porque estaba en los últimos días de clases... Hace
unos días le dio ganas de vomitar y pensamos que fue porque le cayó mal la
comida, incluso, al estar mal de la barriga le avisé a mi pareja que iba a
llevarla al médico y él quería acompañarme. No lo noté raro, sino preocupado
para que la niña esté bien", relató la mamá.
Finalmente, tras la denuncia, el hombre se encuentra en
celdas policiales en la zona de Los Tusequis, para luego ser puesto a
disposición de la justicia.
"Mi hija se siente más se segura, la veo más tranquila,
me abraza y me dice: mamá vamos a salir adelante. Aunque también dice que no
quiere tener eso en la barriga", señaló.
La mamá y sus dos hijas recibirán tratamiento sicológico,
debido al trauma que sufrieron, tanto la víctima de violación y su familia, al
enterarse que el agresor sexual era pareja de la mujer.
La familia pide ayuda tanto para las diligencias médicas,
sicológicas y del hogar, ya que, por el proceso en contra del agresor sexual,
dejó de trabajar.
El Deber
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