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| Lic. Sirley Liceth Ortega Valverde |
Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud de uno mismo y los demás nos proporcionan una pauta para formular metas y propósitos, personales o colectivos. Reflejan nuestros intereses, sentimientos y convicciones más importantes hacia una sociedad.
Es relevante mencionar que en la actualidad existe una
compleja crisis de valores sociales que afecta a la sociedad en general, en la
medida en que se visto afectada la sana convivencia entre unos y otros. En este
sentido es importante reconocer el papel que desempeña la familia .Los valores
son características morales positivas que apreciamos en nosotros y en los demás
y que ejercen una fuerte influencia en las actitudes de las personas.
Convirtiéndose en la base de nuestra convivencia social y personal a través de
los valores logramos equilibrio armonía entre nuestro mundo interior y exterior
del mismo modo cuando hablamos de valores estamos hablando de realidades que
tienen un valor y que por tanto deben existir ,
deben regir nuestras vidas, deben promoverse.
Los valores valen por sí mismos. Son importantes por lo que
son, lo que significan, y lo que representan, y no por lo que se opine de ellos
las actitudes y conductas están estrechamente relacionados. Cuando hablamos de
actitud nos referimos a la disposición de actuar en cualquier momento, de
acuerdo con nuestras creencias, sentimientos y valores.
Se traducen en pensamientos, conceptos o ideas, pero lo que
más apreciamos es el comportamiento, lo que hacen las personas. Una persona
valiosa es alguien que vive de acuerdo con los valores en los que cree. Ella
vale lo que valen sus valores y la manera cómo los vive, Pero los valores
también son la base para vivir en comunidad y relacionarnos con las demás
personas. Permiten regular nuestra conducta para el bienestar colectivo y una
convivencia armoniosa quizás por esta razón tenemos la tendencia a
relacionarlos según reglas y normas de comportamiento, pero en realidad son
decisiones. Es decir, decidimos actuar de una manera y no de otra con base en
lo que es importante para nosotros como valor. Decidimos creer en eso y
estimarlo de manera especial al llegar a una organización con valores ya
definidos, de manera implícita asumimos aceptarlos y ponerlos en práctica. Es
lo que los demás miembros de la organización esperan de nosotros.
Todos los valores existentes son necesarios para nuestra
vida, sin embargo en este trabajo hablare sobre uno que es base para nuestra
relación con las demás personas como es el valor del respeto.
DESARROLLO:
El respeto de los niños hacia los padres es fundamental en
toda, recibir educción fomentada en valores es indispensable en el desarrollo
de un niño, y el respeto forma parte de las personas nobles que se preocupan
por los demás.
Educar niños en valores
es una tarea largo plazo, que
requiere dedicación tanto de padres como de los profesores. Para fomentar el
sentido del respeto responsabilidad en los niños es recomendable empezar
formándoles poco a poco en el compromiso, intentando que desde pequeños
formen buenos hábitos.
En este sentido es de gran importancia señalar que dichas
funciones en su mayoría solo pueden ser llevadas a cabo por la familia ,ya que esta no solo
representa y simboliza la relación más natural de las y los sujetos dentro de
la sociedad, sino que también es concebida como la institución socialmente más
importante.
Debido a que los padres dieron vida sus hijos e hijas son directamente los
responsables de su educción, por lo cual deben ser ellos sus primeros
educadores, el deber de la educación familiar compromete a los padres a la
formación de un ambiente conveniente que permita la educación integral de sus
hijos e hijas.
La familia es considerada según Quinteros (1997), como “el
espacio vital para el desarrollo humano para garantizar su subsistencia. Es un
sistema íntimo de convivencia en el que la asistencia mutua y la red de
relaciones de los miembros la definen y la determinan”
(P.37-38).
Los padres de familia son
los principales educadores de sus hijos, sobre todo temas de valores. La
escuela, maestros tienen una función complementaria, es muy importante estar
convencido de que la formación en los valores y en actitudes positivas está en la
familia.
El mundo se está volviendo cada vez más materialista y
poseen muchos antivalores, reniegan cada momento de los valores familiares e
incentivan las prácticas del todo vale
por dinero, se están olvidado de la capacidad de imaginar, soñar, tener un
mundo mejor, una comunidad mejor. Según Savater (2008),”Si soñamos con que
vamos a volar, pronto empezaran a brotarnos alas. Volaremos algún día”
(p.13).El autor expresa que se debe fomentar los valores, y que los seres
humanos tengan la ilusión de vivir en armonía.
Los padres son los primeros y principales
educadores de sus hijos por dos razones, la primera es que en la familia
se da la mayor proximidad entre el educador y el educando y los padres. La
segunda no solo hay proximidad física, al convivir bajo el mismo techo sino
también proximidad biológica al participar con Dios en la generación de los
hijos, y proximidad espiritual al convivir y participar de la intimidad como
personas. Por tanto la educación es el complemento natural de la generación de
los hijos. El padre es principio de generación, educación, disciplina y de todo
cuanto se refiere al perfeccionamiento de la vida. (Santo Tomas de Aquino).
CONCLUSIÓN:
Los valores es la base para una convivencia agradable, si
enseñamos a los niños a respetar, con el simple y humilde valor de respetar a los demás y otras cosas, Con
eso ya tienen para ser una persona de bien y así mismo seguir poniendo en
práctica los demás valores. Los padres tienen un compromiso, una
responsabilidad grande con la educación de sus hijos, depende de la familia
para que a un futuro vivamos en armonía en una comunidad en paz.
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