EFE
Las relaciones entre Pekín y Washington alcanzaron este lunes preocupante máximo de deterioro, con el cierre del Consulado de EEUU en la ciudad de Chengdu, en respuesta a la clausura el jueves del chino en Houston, en una espiral a la que los expertos no ven salida hasta pasadas las elecciones norteamericanas.
Más de 35 años después de su apertura, la sede consular estadounidense en Chengdu, ciudad suroccidental y capital de la provincia de Sichuan, arriaba ayer la enseña del país norteamericano, en unas imágenes retransmitidas por la televisión estatal china CCTV.
Poco después, local la legación cerraba y funcionarios chinos tomaban posesión de las instalaciones, según confirmaba el Ministerio de Asuntos Exteriores, entre una nube de curiosos que se acercaron a presenciar el momento, mientras unos operarios cubrían el nombre del consulado en el muro exterior con una gran placa blanca.
Las relaciones entre Pekín y Washington alcanzaron este lunes preocupante máximo de deterioro, con el cierre del Consulado de EEUU en la ciudad de Chengdu, en respuesta a la clausura el jueves del chino en Houston, en una espiral a la que los expertos no ven salida hasta pasadas las elecciones norteamericanas.
Más de 35 años después de su apertura, la sede consular estadounidense en Chengdu, ciudad suroccidental y capital de la provincia de Sichuan, arriaba ayer la enseña del país norteamericano, en unas imágenes retransmitidas por la televisión estatal china CCTV.
Poco después, local la legación cerraba y funcionarios chinos tomaban posesión de las instalaciones, según confirmaba el Ministerio de Asuntos Exteriores, entre una nube de curiosos que se acercaron a presenciar el momento, mientras unos operarios cubrían el nombre del consulado en el muro exterior con una gran placa blanca.
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