Para el pasado lunes estaba fijada la asamblea del pueblo Weenhayek, en donde debían decidir si revocan o no el mandato a sus representantes en la Asamblea Departamental y la Asamblea Regional. Sin embargo, en el desarrollo de este evento se han registrado enfrentamientos entre quienes respaldan y están en contra de esta iniciativa, fracturando a este pueblo indígena.
La asamblea debía realizarse en la unidad educativa de
Tunteyas, a solicitud de Pablo Rivero quien dice ser capitán grande del pueblo
Weenhayek, bajo supervisión del Tribunal Electoral Departamental (TED),
representado por los vocales Andrés Cuevas, Gustavo Ávila y Marco Aguirre.
El presidente del TED, Marco Aguirre, detalló que cuando
llegaron al lugar del evento han podido evidenciar la presencia de unos 100
capitanes comunales del pueblo Weenhayek, y que afuera, alrededor de unas 80
personas.
“Un grupo de 30 personas bloquearon la puerta de ingreso, al
parecer el objetivo era evitar que el TED y la comisión del SIFDE (Servicio
Intercultural de Fortalecimiento Democrático) participen, pero nos hemos
constituido con el comandante de la Policía, el Fiscal de Turno y la
Defensoría, donde hemos conversado con ellos, hubo algunos empujones, pero se
logró llevar adelante la asamblea”, afirmó.
Aguirre, al ser consultado sobre cuáles han sido los
resultados de esta asamblea, evitó dar detalles, argumentando que el SIFDE debe
realizar un informe, el cual debe evaluar si se han cumplido las normas y
procedimientos propios, y si goza con las firmas de los capitanes. Este
documento se hará conocer hasta el lunes 18 de diciembre.
Surgen críticas
Francisco Pérez, quien también asegura tener la titularidad
en la capitanía del pueblo Weenhayek, afirmó que no se realizó ninguna
asamblea, esto debido a los enfrentamientos que se han registrado, además por
seis observaciones que se han planteado al TED, las cuales no se estaban
cumpliendo.
Pérez sindicó de responsabilidad al TED por los
enfrentamientos registrados en la asamblea, ya que han buscado coartar la
participación de los capitanes de varias comunidades, denotando una parcialidad
con la dirigencia de Rivero.
Asimismo, Pérez mencionó que en esta asamblea el dirigente
Rivero buscaba dar legitimidad a su mandato, haciendo que el TED lo posesione
como capitán grande, hecho que muchas comunidades lo rechazan, debido a que
esta persona no es reconocida por el Consejo de Ancianos del pueblo Weenhayek,
que es la única instancia que da legitimidad a un capitán.
“Son cerca de 400 capitanes los que han venido y me siguen,
la otra parte no tienen ni 100. Y ahora no sabemos a quién están revocando,
porque los asambleístas Federico Salazar y Rubén Aparicio no tienen
credenciales”, cuestionó Pérez.
Asimismo, advirtió que existe una cercanía “sospechosa”
entre el presidente del TED y Rivero, dejando ver que detrás de esta
parcialización hay intereses políticos.
El País
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